Por limitarme a hacer lo que creía correcto, por ayudar cuando lo vi oportuno, me herí como nadie había sido herido con anterioridad. ¿Que por qué lo hice? Porque no hay nada en este mundo que no haría con tal de conseguir verte aunque sea una pizca más feliz. Y si, hay veces que para lograrlo tengo que verme hundida en el fango. Y no debo manifestarlo, puesto que así, en vez de ayudar, solo consigo empeorar la situación.
Igual en otra vida, contando con otras circunstancias, no tengamos que salir perjudicados ni el uno ni el otro.
Estás consiguiendo que me acostumbre a no necesitarte. A que todas aquellas chorradas que me importan las guarde solo para mí, y se mantengan siendo eso, simples chorradas.
La verdad es que ando algo desubicada, no se muy bien ni por donde me muevo, ni si te importo a tí, o si siquiera le importo a alguien. Y sé que no debería tener queja, al fin y al cabo, mi vida no está plagada de desgracias, ni siquiera consta de un factor que la convierta en una vida mísera y desagradable. Pero aun así ando perdida. Será normal, todos tenemos momentos de debilidad en nuestras vidas. Supongo que se me pasará.
Pero a lo que iba.
A veces no se si te acuerdas o no de mi. O si lo que pasa es que intentas demostrarlo por que te acostumbraste a ello y lo tienes ya como algo sistemático, como una rutina.
Cuando das señales de vida, lo haces basándote en un patrón de diálogo hace ya tiempo establecido. Y sinceramente, yo así no soy capaz de conversar con normalidad, por que lo veo poco natural.
Hacedme caso: Nunca, y he dicho NUNCA, permitáis que esa diosa de la vagancia manipule vuestras vidas, no consistáis que os deje tomar decisiones equivocadas, solo por el hecho de ser lo más cómodo, de ser lo más fácil. No quiero decir que no tengáis derecho a equivocaros, por que claro que podéis, y lo haréis cientos de veces, todos lo hacemos. Solo digo que no lo hagáis solo por que sea el camino más corto, el camino de rosas, por que todo puede parecer maravilloso, pero esta lleno de espinas. Confundiros, pero habiendo luchado, no dejando todo pasar creyendo que esto servirá de algo.
No me gustaría veros atrapados en una sarta de mentiras que disfracen vuestra calidez, mostrando un rostro que no corresponda a vuestras emociones. Y creerme, todo esto se puede combatir si ponéis empeño y os dais cuenta de que las cosas buenas no llegan servidas en una bandeja de plata.
No os quedéis sentados. Luchad por lo que creáis que realmente vale la pena.
Eres esa persona con la que camino por el parque. El chico con el que me río bajo el sol. Aquel individuo que intenta siempre ponerme nerviosa con su presencia. Quien trata de hacerme compañía si algún tema parece superarme. Alguien que intenta encontrar en mí un oído que le escuche y le comprenda. Esa mirada desconcertante. Ese ser sin ideas claras ...
Nunca hubo ni habrá nada. Pero para mí todo es perfecto.
Para mi nuestra amistad era algo maravilloso, raro; peculiar para muchos. Pensé que sería así siempre, y con esto no quiero decir que ya no quedé amistad entre ambos, si no que ya no queda nada de ese toque fascinante que tenía.
Antes podíamos estar horas y horas hablando, ahora me llamas pesada si te cuento las cosas que me suceden. Puede que le de mucha importancia, pero es que tú para mi la tienes.
Esto es solo un ejemplo de los pequeños detalles que estás teniendo de un tiempo a esta parte. Y si, puede ser que por esto me haya mostrado algo más distante últimamente, pero es que todo me acababa resultando ya incomodo.
Y no solo no te das cuenta, si no que te quejas de mi actitud.
Más vale pájaro en mano, que ciento volando, pero si ese pájaro no te gusta, mejor sola que mal acompañada. Aunque ya se sabe que más vale malo conocido, que bueno por conocer. Pero siempre teniendo claro que cada mochuelo a su nido.
Se había vuelto fría, incapaz de mostrar lo que sentía. Tanto tiempo estuvo escudándose en el sexo, que ya nadie la ve capaz de amar. Lamentablemente su mirada había perdido aquel brillo tan característico plagado de inocencia. Ahora sus ojos no son diferentes a los de cualquier otra persona que ha sufrido mucho. Había aprendido a no mostrar sus sentimientos, temiendo que hacerlo solo traería dolor y sufrimiento. Si, podía parecer fría, de eso no hay duda, pero ese hielo se derretía con el calor de un simple abrazo.
Pero tras esa apariencia que muestra, se encuentra una niña romanticona. Ella se conforma con lo que a muchos les puede parecer un simple beso, con una caricia, o una mirada sincera.
·Porque no puedo negarte que te quise sin querer
y más que a nadie·
Me gustaría tener el valor suficiente para expresarte todo lo que surge dentro de mí cada vez que siento cerca tu presencia. Pero nunca digo nada, me limito a disfrutar contigo los minutos, compartir juntos buenos momentos. Creo que con esto me doy por satisfecha, me sobra esto para ser feliz. Pero son tantos los momentos en los que te encuentras paseando por mi mente, tantas las ilusiones que creo alrededor de tu ser… ojala te dieses cuenta, ojala pudieses saber todo lo que hay dentro de mi. Pero no lo ves, ni siquiera eres capaz de imaginarlo. Se que esto es algo que jamás sabrás, y tendré que conformarme con otras vivencias que vayan surgiendo por mi camino.
Me encantaría que te acercases ami y me dijeses que sabes que van por ti estas palabras, y que te gustaría intentarlo, que estabas esperando una señal para dar el paso de decirme lo que sentías.
Claro que me encantaría… pero esto nunca ocurrirá, eso solo sucede en las películas. En la vida real yo me tengo que conformar teniéndote en mi mente. Sin que tú sepas nada. Sin que tú sientas nada.
En ocasiones necesito de ti, más veces de las que me gusta reconocer. Y esto sucede cuando el Mundo me supera, cuando cada una de las situaciones que conforman mi rutina, se me vienen encima y me gustaría que por un instante desapareciesen. Cuando esto ocurre, una de las pocas cosas que necesito para olvidarme de todo es tu presencia, es tenerte cerca y charlar durante un largo tiempo. Muchos dirán que ese tiempo solo lo invierto para “tener algo contigo”, y admitamos que a ti te gustaría que así fuese, pero yo solo lo hago porque me haces sentir mejor, y desconectar de todo cuanto me desagrada o agobia. No se si esto es utilizarte o no, pero recuerda que me prometiste que siempre seriamos amigos, por encima de cualquier deseo o intención. Y yo de ti es lo que busco, un amigo. Y te busco, precisamente a ti, en estos momentos de superación, dado que estás fuera de mi entorno, por lo que la desconexión se efectúa de un modo más real. Perdón si esto lo ves como un acto egoísta, pero me gustaría que lo vieses como que es a ti a quien elijo para compartir todo esto, y no a cualquier otra persona.
Cada vez que se que puedes estar cerca, no hago más que buscar tu rostro en medio de la multitud, y en cuanto lo localizo, no soy capaz de dejar de mirarte. A veces te das cuenta, y me sonríes, pero te encanta hacerte el interesante, o yo que se, quizás ni siquiera le des importancia a esas miradas. Más tarde, cuando mucho tiempo ya ha pasado, te acercas y me dices un par de chorradas, que solo tienen significado para nosotros, y ambos nos reímos. Pero pronto te vas. Las cosas ya no son como eran antes, ya se han perdido las horas y horas de conversación, la complicidad entre ambos, los amaneceres vistos en compañía el uno del otro. Que penita. Siento la necesidad de que te acerques ami, me beses y luego me eches la culpa de que eso haya sucedido, que digas que no sabes como lo hago, pero que siempre te acabo teniendo.
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