Estás consiguiendo que me acostumbre a no necesitarte. A que todas aquellas chorradas que me importan las guarde solo para mí, y se mantengan siendo eso, simples chorradas.
La verdad es que ando algo desubicada, no se muy bien ni por donde me muevo, ni si te importo a tí, o si siquiera le importo a alguien. Y sé que no debería tener queja, al fin y al cabo, mi vida no está plagada de desgracias, ni siquiera consta de un factor que la convierta en una vida mísera y desagradable. Pero aun así ando perdida. Será normal, todos tenemos momentos de debilidad en nuestras vidas. Supongo que se me pasará.
Pero a lo que iba.
A veces no se si te acuerdas o no de mi. O si lo que pasa es que intentas demostrarlo por que te acostumbraste a ello y lo tienes ya como algo sistemático, como una rutina.
Cuando das señales de vida, lo haces basándote en un patrón de diálogo hace ya tiempo establecido. Y sinceramente, yo así no soy capaz de conversar con normalidad, por que lo veo poco natural.
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