Mi paciencia no me deja esperar a que se enfrie el té,por eso siempre, sea la época que sea del año, le hecho un hielos. Pero aún así, para el resto de las cosas soy capaz de esperar todo lo que haga falta o más. Soy capaz incluso de esperar años, hasta llegar al punto en que olvido lo que estaba esperando y sigo viviendo la vida encontrando por el camino cosas por las que esperar.
Gran número de ocasiones me encuentro en un conflicto interno en el que me trato de convencer de que la vida es mejor vivida a lo loco, y me meto en dilemas sin sentido sin tener en cuenta las ventajas que produce el saber esperar.
Mi vida se ha ido constuyendo así, con momentos de no esperar ni un segundo, y con momentos de espera eterna. Parece ser que los puntos medios nunca fueron de mi agrado. Y de extremo a extremo se pierde una estabilidad que sin duda creo precisa a ratos, (parece ser que mi cuerpo me pide algo de normalidad para variar). Temo que esto pueda significar que me he rendido ante un mundo de cuerdos, o que me haya dado cuenta que hoy en día ya nadie lo está.
Escúchame, tengo mas días guardados aquí para esperarte.
Recordarás que no me importa, tengo paciencia.
Recordarás que no me importa, tengo paciencia.
·Los Piratas·
1 comentario:
Precioso. Me encanta!!!!
loveonchocolate.blogspot.com
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